El Primer Círculo

Wednesday, December 29, 2004

De como aparecen manchas sangrientas en mis cigarrillos

Con cierto cenicero de cristal me sucede que coloco mis cigarrillos y les aparece algo así como una mancha de sangre por la mitad. Muchas veces busqué entre mis dedos alguna herida (a veces sucede, con la guitarra) o en mi boca. La primera vez que me sucedió di por hecho que era el cigarro y prendí otro y sucedió lo mismo y pensé que eran ellos-los-malditos. Pero ha vuelto a pasar.
He llegado a esta hipótesis. Por el frío (tengo la ventana abierta) el cenicero se humedece ligeramente y al colocar el cigarro encima por el tabaco y eso queda una mancha café rojizo. He intentado repetir el experimento con agua pero se moja como se moja cualquier cigarro, sólo se oscurece el papel, no parece sangre. Quizá tenga que ser una cantidad mínima de agua pero no tengo la paciencia para hacer eso.

Manifiesto del Ateo

1- No hay Dios.

Reflexión personal

Con este título me refiero a mis repetidos intentos de autofellatio. Quizá las primeras veces fue en serio, ¿no valía la pena intentar al menos una vez? Si no pueden identificarse con lo que digo piensen al menos en las veces que han tratado de mover cosas con la mente. Las últimas fueron por motivos lúdicos.
El autofellatio es tan sólo uno de mis autofellatios.

(Nota: una pelea interna se llevó a cabo dentro de mi cuando decidí escribir "autofellatios" y no "autofellationes")

Coño

"¡Coño! ¡Se lo creyeron!"
- García Márquez, relatando lo que pensó cuando se enteró que recibía el Premio Nobel de literatura.

Cuando alguien pide que se quemen todos sus escritos (o lo que haya que quemar dependiendo el contexto) le está dando cierta importancia a su obra. Tomemos este caso típico, "es paja, todo lo que he escrito es paja". ¿Pero si fuera tan abiertamente paja por qué el temor a que las futuras generaciones, o tan sólo algún despistado, se pierdan en su obra. Para decirlo a la manera de Ockham, tendría que ser una paja muy chingona.
Además caben dos posibilidades. O bien conviene echar a la hoguera aquello como opuesto a lo que debería permanecer, o bien todo convendría más bien quemarlo y el moribundo (como suele suceder en estos casos) sólo está haciendo su parte.
Optaría yo por la segunda opción, pero no desde la situación cínico-nihilista. A veces me parece estúpida esa actitud de atesorar los productos literarios como joyas irrepetibles. Los hombres nos las vamos arreglando a través de los milenios y van saliendo cosas y quieren decir más o menos lo mismo. Ni siquiera el sagrado Dharmma es impermanente, y según la tradición algún día dejará de ser comprendido.
Mientras tanto yo aquí encerrado seguiré intentando hilar oro con paja. O paja con oro. Hace tiempo que no sé la diferencia.

Vida Personal 2

Soy como un suicida de segunda división. Estoy tranquilo y espero, porque sé que tarde o temprano me voy a quedar dormido, creo que alrededor de las 7:00 am, sobre todo si hace frío, y mañana despertaré en la tarde y podré hacer lo mismo.
¿Por qué me revienta ver lo jodido que me siento cuando leo un poema que refleja lo jodido que me siento? (O lo jodido que me sentí hace dos, tres o cuatro años, que a fin de cuentas es lo jodido que me siento). La angustia de todas maneras la tengo, sin embargo verlo en papel es de algún modo molesto. Pagar los platos rotos es inevitable, pero es imbécil embelesarse contemplando la factura.

Vida Personal 1

Hoy intenté sacar una canción de Elliott Smith en guitarra. No una en específico, la que fuera. No pude. Siempre pensé que podría. Es el mismo mito de siempre. O más bien es verdad, podría aprender muchas cosas pero no lo voy a hacer, así como podría quedarme parado en el mismo sitio 24 horas y hacer un voto de silencio de tres años, pero no puedo.
Pero esas son cosas laboriosas. Están las cosas que se pueden hacer, para decirlo a la manera de Ockham, de un chingadazo. Seguramente muchos de ustedes creen que podrían desnudarse y correr en un centro comercial (sin ninguna situación extrema de por medio) y en realidad tendrían realmente que intentarlo para saberlo, quizá no pueden. Eso, o todas las veces que según ustedes han estado a punto de aventarse de un piso alto sólo por pensar que podrían. Casi vencen la barrera, que bueno que recobraron la prudencia porque si hubieran intentado un poco más habrían saltado. Patrañas.